La respiración es el uno de los vehículos del prana o energía vital.
La respiración consiente consiste en llevar la atención a la respiración, la inhalación y la exhalación, visualizando como ingresa el prana y egresa el apana.
Este ejercicio, además de silenciar la mente, recarga de energía vital nuestro cuerpo y mente.
Se puede visualizar como nuestro cuerpo se va llenando de luz en cada inhalación y como se expulsan las toxinas en cada exhalación.
En yoga esta es una de las herramientas mas importantes para lograr los efectos de relajación y armonización de nuestra mente, como también mejorar nuestro estado físico. Se la llama pranayama que es una palabra sanscrita que significa control del prana.
Los japoneses llaman a esta energía vital Ki y los chinos chi. Cada cultura nombró de alguna manera esta energía y la uso para la sanación y curación a través de las manos o de distintos rituales.
Las principales maneras de adquirir prana son la alimentación, ingerir agua y la respiración. Bendecir los alimentos imponiendo las manos, o cargar el agua bendiciéndola es una manera de aumentar el prana y de esta manera elevar nuestra vibración.
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